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La agrupación musical cartagenera participa en siete de las diez jornadas de la Semana Santa de Cartagena, con doblete el Domingo de Resurrección con cien músicos repartidos en dos agrupaciones. A la conclusión, ya es tradicional, la banda se dirige a ritmo del animoso 'Amparito Roca' (tema casi centenario, pues fue compuesto por Jaime Texidor Dalmau en 1925) hacia la plaza de Los Juncos, donde tiene lugar una comida de hermandad.
Pepe Castillo (informador taurino), Matías Barco (presidente de la Asociación 'Cartagena por la Caridad), José Felipe Rubio (presidente de la Asociación Canónica del Cristo de la Divina Misericordia), José Cortado (hermano mayor de la Cofradía del Cristo de los Mineros) y León García (vicepresidente de la Asociación Canónica del Cristo de la Divina Misericordia) tras la 'Procesión del Cristo de los Mineros' de La Unión.
José Jesús Guillén, presidente de la Agrupación de Portapasos de la Virgen de la Piedad marraja, entidad organizadora del certamen nacional de saetas de Cartagena, ha entregado uno de los premios del concurso que se ha celebrado frente al Cristo de los Mineros en la iglesia del Rosario de La Unión.
Agentes de la Policía Local de Cartagena que, con vestuario de gala, fueron la escolta de la Virgen de la Soledad en la 'Procesión del entierro' de la Cofradía Marraja.
La Cofradía Marraja no descarta que, debido a las fuertes ráfagas del aire, haya novedades o suspensión del desfile pasionario de esta tarde. También podría verse afectada la procesión del Domingo de Resurrección. Fuera de la ciudad, el foco cofrade se sitúa en Cabo de Palos, donde hay exposición de los tronos que salieron el Jueves Santo.
Muerte de Cristo en el monte de Jerusalén (luego llamado del Calvario) y posterior entierro. El dolor, con mucho arte y perfecto hacer procesionista, es lo que mostró anoche la Cofradía Marraja con una de las más antiguos procesiones de Cartagena, cuyo origen se remonta al siglo XVII. Arriba, el Sepulcro. Abajo, la Magdalena, que ha cumplido un cuarto de siglo saliendo a hombros.
Se trata de un cuerpo de madera con martilletes móviles que golpean el cuerpo central mientras es girado. Es lo que suena en la iglesia de Santa María desde el Jueves Santo, pues a partir de esa fecha y hasta la resurrección de Jesús, no se pueden utilizar las campanas.
Desde CARTAGENADEHOY.com queremos que el municipio conozca la actividad de nuestros procesionistas, personas que de forma altruista (y pagando las cuotas) engrandecen a Cartagena y a su gente a través de un sentimiento muy arraigado que perdura año tras años gracias a su esfuerzo. Cubrir su actualidad es un homenaje a los procesionistas de la ciudad y a los de más de diez localidades del municipio que también sacan desfiles pasionarios.
La 'Procesión del silencio' sigue subiendo de nivel con las novedades de cada edición, que en esta ocasión ha sido el estreno de los vestuarios que otorgan uniformidad a sus tres tercios, dentro de un cortejo pasionario del que se despide Anastasio Guerrero, junto a su directiva, como presidente de la Agrupación de la Semana Santa de El Algar.
La publicación es editada por la agrupación Santo Sepulcro y Expolio de Jesús desde hace medio siglo en su primera etapa y desde 1987 con la segunda, con la que ha llegado este año al número 129. En la fotografía, con ejemplares de diferentes ejercicios, posan Pedro M. Ferrández, Nieves Terry (presidenta de la agrupación), José Sanchez y Alejandra Balibrea.
La Pescadería es el lugar que más se identifica con estas dos típicas bebidas de Cartagena y, especialmente, en la noche del Encuentro. es incalculable lo que llegaron anoche a servir, pues el interior de la lonja de pescados estaba ‘de bote en bote’ y se llegaron a contabilizar ocho filas de personas esperando ante las barras.
Aurora, Alberto, Victoria, Isa, Alejandro, Luis y Lucía en la Pescadería de Santa Lucía durante la madrugada del Encuentro.
El tiempo respetó y volvió a ser ‘la madrugada de cada año en la que Cartagena no duerme’ con miles de personas de trasiego por la ciudad para ver salir a las diferentes procesiones, siendo el culmen cuando el Nazareno se encuentro con su madre, ‘La Pequeñica’. En la imagen, salida del Jesús desde la Pescadería con el sonido de la caracola.
