Kike Muñoz ilumina El Beal de Navidad
El joven, de 16 años de edad, es un enamorado del espíritu de estas fechas desde bien pequeño y cada año va ampliando el montaje luminoso que rodea su casa, habiendo alcanzado cerca de medio kilómetro de cableado con luces de colores y de imágenes en movimiento, además de instalar como antesala un árbol con dos renos.
Cuando los conductores cruzan de noche El Beal no pueden evitar dirigir sus miradas hacia una vivienda ubicada frente a ‘la nave de la lavandería’ que reboda Navidad. Realmente es espectacular y cautivadora para la vista. El autor de este montaje es Enrique Muñoz Mendoza, un joven apasionado de la Navidad de tan sólo 16 años de edad al que su abuela Loli inyectó de bien pequeño el virus navideño, que Kike, como se le conoce, fue aplicando al montaje del Belén y a la iluminación exterior.
Cuando lo visitamos y tras una primera contemplación global de todo lo que ha montado, nos dice que la ausencia de alumbrado navideño público en el pueblo le ha motivado a aumentar lo que vienen haciendo desde hace unos cuatro años, aunque las sensación que nos da es que más que un ‘pique’ es una ‘pasión’ en una persona llena de creatividad.
El trabajo de instalación de esta obra lo inició hace unos dos meses. “Lo primero que hago es revisar todas las luces del año anterior y reparar las que se hayan estropeado”, nos explicado, para después comenzar a instalar lo que tenía más las nuevas incorporaciones, como este año han sido los Reyes Magos y las cortinas de imágenes que están en un lateral de la finca a lo largo de una pared de unos ciento cincuenta metros. Son escenas en movimiento que, además, controla desde un terminal móvil, pudiendo cambiar las temáticas. Espectacular.
Toda la obra está coronada por una estrella navideña ubicada en la antena de televisión, la cual va alternando sus tres posiciones. Toda la pared que rodea a la vivienda familiar tiene algún tipo de iluminación, pero el montaje salta también a una antesala donde el joven de El Beal ha montado un jardín con un árbol luminoso y dos palmeras, en cuyos laterales hay dos renos de luces que le ha regalado un vecino. Él ha creado ese espacio con azada, habiendo enterrado los cables y formado un pequeño perímetro elevado donde ha instalado macetas con la flor de Navidad, “es un trabajazo, pero disfruto”, apunta. También es novedad el ‘Feliz Navidad’ de luces de la entrada, que, tras ardua búsqueda, localizó en tierras de Barcelona.
¿Cuántos metros de cableado habrá en total?, le preguntamos y Kike efectúa unos rápidos cálculos que, si se pusieran todos de forma lineal, estaría cerca del medio kilómetro. También es importante la inversión económico que hay detrás de este brillante enclave navideño, pero el gasto ha sido escalonado. “En lugar de regalos, siempre nos pide dinero para ir empleándolos en su ilusión”, apuntan sus padres, Isabel y Enrique. Por cierto, esos ‘regalos’ llegan el 6 de enero, “pues yo soy más de de Reyes Magos que de Papá Noel”.
Mientras estamos conversando con Kike, somos testigos de cómo dos grupos de personas acuden a este lugar para ver ‘la casa de las luces’, cuya popularidad también recorre las redes sociales. Es un polo de atracción que encanta. “¡Kike, qué bonito!”, escuchamos a una visitante. Lo que también percibimos es mucha empatía entre los vecinos y el joven. Además de que con algunos hay ayudas mutuas, también observamos como bastantes viviendas del entorno están iluminadas de Navidad, lo que, al parecer, se ha potenciado en los últimos tiempos, quizás motivándose uno con otros hasta convertir El Beal, por iniciativa de sus residentes, en uno de los pueblos más navideños de Cartagena en este 2023-2024.
Desde el inicio del ‘camino de las luces’ hasta lo más alejado de la vivienda familiar hay mucha distancia con acceso cómodo para cualquiera, por lo que nos interesamos en conocer si en el tiempo que lleva con este montaje ha sufrido actos vandálicos. Su respuesta es negativa, lo que alegra conocer. Sin embargo, por si acaso, Kike ha encadendo algunas figuras, como los renos, y ha instalado diversas cámaras de seguridad cuyas imágenes visiona desde su móvil.
Otro aspecto a destacar es que Kike Muñoz emplea muchas horas en este espectáculo sin que vaya en detrimento de su formación, como reflejan los sobresalientes que va acumulando en las notas de la FP en que se está formando en el IES Pedro Peñalver de El Algar pensando en un futuro en el mundo agrícola donde ya tiene muy claro lo que quiere ser.
El tiempo que estamos con este joven de El Beal, además de su creatividad, nos hace observar que también es una persona metódica y planificadora. En su mente ya está preparando lo que hacer para dentro de un año, donde destacar un portal de Belén de madera con figuras de considerable tamaño junto al jardín de la entrada. “Todo esto puede crecer”, expresa.
Lo que estamos contando es lo que se ve, pues además monta el Belén familiar dentro del domicilio cada año. Ahora llegan los días para disfrutar de su obra. Luego, tras la Navidad, tocará recoger todo el material y guardarlo, pero habrá quedado la satisfacción de que ‘la casa de las luces’ de El Beal habrá transmitido sensaciones muy navideñas a muchas personas.
