'La verdadera historia detrás de la leucemia infantil'
'Lecciones de vida'
La protagonista de esta heroica historia se llama Alejandra y, con tan sólo cuatro años, puede decir que sabe lo que es luchar por seguir viva. Siente en cada célula de su cuerpo los estragos de la quimioterapia, que es el salvavidas de cualquier enfermo de cáncer. Este testimonio nos lo relata Saray Segura Martínez, madre de Alejandra y Aitana, de nueve años, quienes junto con su marido Luis residían en un barrio de Cartagena cuando esta pesadilla, de la que quieren despertar, comenzó".
Esta madre batalladora nos cuenta cómo a principios de junio de 2023 empezó a observar síntomas anómalos en su pequeña, activando la alerta de que algo no iba bien y, con eso, ayudando a prevenir que la enfermedad se hubiera alargado más. Nos cuenta que su pequeña se cansaba más de lo normal cuando llevaba poco rato jugando, observaba moratones en su cuerpo, la nariz le sangraba y sus defensas no funcionaban correctamente.
Dado que los síntomas de Alejandra no persistían y ella, como madre, sentía que algo no iba bien, optó por visitar a su pediatra, llevando la firme convicción de que no abandonaría la consulta sin someterse a un análisis que aliviara sus inquietudes.
El mismo día en que le realizaron la analítica a Alejandra, y aun no siendo ni mediodía, llaman a esta madre informándole que debe presentarse de inmediato en el Hospital de la Arrixaca, específicamente en la unidad de oncología infantil, ya que la analítica no ha arrojado resultados favorables. Esta madre se encuentra completamente desorientada, sin saber por dónde empezar a asimilar la situación.
Leucemia linfoblástica aguda, ese fue el diagnóstico de esta protagonista, y los peores temores se confirmaron. Después de muchas semanas de miles de pruebas, por suerte, se corroboró que la leucemia no había avanzado lo suficiente para temer por su vida. Sin embargo, como es común en estos casos, comenzaron a administrar quimioterapia intratecal para evitar que eso sucediera.
Saray recuerda que ella no es la única en esta unidad de oncología infantil; hay madres y padres sufriendo por sus hijos con diagnósticos similares y otros sin solución alguna. Muchos de estos diagnósticos sin posibilidad de cura provienen de médicos y pediatras que les han restado importancia y los han mandado a casa después de muchas visitas a urgencias. Es doloroso escribir esto, pero, por desgracia, es la triste y cruel realidad.
Gracias a la rápida prevención precoz de esta madre y a encontrar a un buen médico, la niña ha llegado a tiempo. Actualmente, está finalizando sus ciclos de quimioterapia para recuperar una vida normal y dejar atrás esta terrible pesadilla. Sin embargo, esta madre desea dar voz y visibilidad a esta enfermedad, así como a los cientos de casos que llegan allí y, lamentablemente, no encuentran una cura.
Además, ella desea destacar la labor de la Fundación Uno entre Cien Mil, que se dedica a la investigación de la cura para la leucemia y lleva a cabo diversas iniciativas para recaudar fondos. Convertirse en socio es una forma de contribuir y aportar tu granito de arena. Vale la pena mencionar que la leucemia infantil es la menos investigada y la que menos fondos recibe, por lo que cualquier ayuda es crucial en esta lucha.
Desde este periódico y en mi nombre, deseamos que esta maldita enfermedad se erradique y se pide más investigación y contribución por parte de nuestras administraciones. Demos visibilidad a esta realidad.
Los vecinos pueden colaborar con esta sección proponiendo entrevistas o temas de interés en este marco. Deben hacerlo escribiendo al correo electrónico Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo. con una explicación somera y facilitando un teléfono de contacto para el supuesto de ser seleccionado.
